
San Avilés es un artista cuya obra se desarrolló principalmente en Europa. Pocas de sus piezas forman parte de colecciones de acceso público y, en ocasiones, sus temáticas limitan su exhibición en espacios comunes, a pesar de que la mayoría es sugerente y no explícita. En esta ocasión, Santiago Martínez—curador y sobrino-nieto del pintor—nos ofrece una ventana a su obra, incluyendo algunos elementos personales resguardados por la familia, lo que representa una oportunidad poco común para conocer más sobre este artista.